NUEVOS FUNADORES

junio 17, 2021

6to Cuatrimestre Sebastián Martínez Díaz

“Es callada, tímida e inocente tiene la mirada” … así comienza una de las canciones más reconocidas a nivel internacional, cualquier mexicano ha bailado, cantado o simplemente escuchado la canción de Los Ángeles Azules, una canción que ya entró en el top de las cosas funables o cancelables por la nueva generación, acompañando a ejemplares como Pepe Le Pew, Café Tacvba, entre muchas más cosas y personajes por el simple hecho de “promover” o “incitar” algo que va en contra de los ideales de la reciente generación, la tan conocida generación de cristal.

Pero antes de empezar, ¿Sabes lo que es funable?, es un término utilizado por la generación joven, el cual hace referencia al hecho de cancelar, acabar o eliminar algo o alguien. El término “FUNAR” nace de un juego que se hizo popular en el 2020 y 2021, Among Us, en el que se utiliza la palabra para referirse a la acción de eliminar a algún jugador de la partida, el juego con su popularidad hizo que la palabra se volviera una de las más dichas en los jóvenes de hoy en día.

Ahora bien, ¿Qué es la generación de cristal y porqué se les dice así a las personas más sentidas y vulnerables de la sociedad?, principalmente se les dice así por su característica más notable, pues tienden a ser frágiles y no tienen tolerancia. Los jóvenes que nacieron después del año 2000 son denominados como la “generación de cristal”, que se asocia a la fragilidad, de acuerdo con la filósofa Montserrat Nebrera. Dicha generación se ha dedicado en el último año a cancelar todo lo que no le parece “correcto”, dejando de fuera lo que sí es moralmente correcto y a pesar de que llevan aún más tiempo haciéndolo ahora es más notable y se puede ver desde el mal uso de la palabra anti sonante que se gritaba en los estadios por la afición mexicana, el famoso “eeeehhhh… p…”, pues la gente creía que se refieren al homosexual cuando no es así, y es que es verdad, es un tema delicado, pero, se mal interpreta, pues la palabra anti sonante se refiere a cobarde, ahora que ya no se puede decir y se logró “erradicar” con eso lo quieren seguir haciendo con lo demás, sin saber el contexto, sin informarse y sin razonar desde un punto verdaderamente lógico.

Si bien es cierto, existen generaciones que están en una lucha eterna con las otras, no obstante, nosotros como una sociedad colectiva deberíamos ayudarnos, entender que el debatir es exponer los puntos de vista y unificarlos, no hacer que los demás piensen igual que tú, pues si todos lo hacen la vida sería aburrida y monótona, el respeto es algo de lo que carece muchas veces la población mexicana, no somos capaces de ver las cosas como son y nos enfrascamos en algo y queremos funar con lo que vaya en mi contra porque se eso está mal, cuando es todo lo contrario.

Las nuevas generaciones crecen tan rápido que no tienen la capacidad de analizar, pensar y resolver, creen que el cambio se encuentra en terminar con algo, cuando lo correcto sería orientarlo a ser mejor, no son capaces de diferenciar una caricatura de la vida real, estamos entre una generación tan tecnológica y avanzada que ni ellos mismos se comprenden, se vuelven crédulos ante el internet por falta del mundo real y se enfrascan tanto en cosas literales que olvidan lo que es procesar la información. Mucho de ello tiene que ver con la manipulación en las redes y la mala educación que se les da a los niños, pues desde que la mamá o el papá deciden darle un celular a un niño de 7 años para entretenerse en lugar de un libro o alguna actividad al aire libre es donde recae el mal ejemplo y el impulso de las masas para hacerlos madurar sin disfrutar, sin pensar.

Funar todo se vuelve tan monótono, predecible y poco fundamentado al grado de que son incoherentes con sus propios argumentos, quieren terminar con series “machistas” y letras “denigrantes” pero idolatran a los más vulgares y que menos aportan a la sociedad, pues hacemos más caso al entretenimiento que al conocimiento mismo. Las cartas están sobre la mesa y lo único que puedo decir es que, si de verdad queremos vivir en paz, tenemos que aprender a respetarnos nosotros y a analizar lo que queremos, porque en una sociedad en la que es más funable una caricatura que un “artista” hablando de sexo y drogas sin escrúpulos ni pelos en la lengua es la señal de una sociedad incoherente e ignorante.